La aparición de la variante Delta, altamente transmisible, y la posibilidad de aumento de los casos de covid-19 en Venezuela suscitan nuevas preocupaciones sanitarias y han planteado dudas sobre las medidas de confinamiento, en particular la seguridad y el ritmo de flexibilización en las calles del país.
Hasta en lugares donde las tasas de vacunación son elevadas, como el Reino Unido, la variante Delta ha provocado un aumento de los casos de covid, especialmente entre los no vacunados, pero también entre los que han recibido sus vacunas.
Protección de las vacunas
Ante la pregunta respecto a si las vacunas ofrecen una buena protección, incluso contra esta variante, se sabe que no son 100% efectivas contra una infección. Incluso antes de que apareciera la Delta esto significa que muy pocas personas desarrollaron síntomas debido al virus.
Sin embargo, lo fundamental es que las personas vacunadas en estos ensayos estaban protegidas al 100% contra la enfermedad grave o la hospitalización. La variante Delta tiene algunas características que le dan más posibilidades de causar una infección, lo que significa que escapa al escudo inicial proporcionado por los anticuerpos.
Pero las personas vacunadas siguen teniendo un riesgo mucho menor de desarrollar una enfermedad grave, o si lo hacen, sus síntomas se resuelven más rápidamente. En otras palabras: la gente seguirá muriendo de covid-19 aunque esté vacunada, pero en un número mucho menor que si no lo estuviera.
Un estudio publicado por científicos de la Universidad de Sri Jayawardenapura, en Sri Lanka, concluyó que la vacuna Verocell (Sinopharm, China) logró una respuesta de anticuerpos de 95% contra la proteína S del SARS-CoV-2, mientras que el Instituo Gamaleya, fabricante de la Sputnik V (Rusia), publicó que esta es más eficiente contra la Delta que cualquier otra vacuna que haya publicado resultados sobre esta variante hasta ahora.
Todo es más con la Delta
Esta variante posee mayor capacidad de contagio, desarrolla síntomas más rápido, posee mayor carga viral (1 mil veces más que la clásica) y es más eficaz infectando células. Ha desarrollado ciertas mutaciones que la hacen más difícil de combatir que a otras, y es capaz de evadir en cierta medida los anticuerpos de las personas previamente infectadas o vacunadas.
Estudios mostraron que la variante Delta comienza a manifestarse luego de los cuatro días de la exposición con otra persona infectada. A diferencia de lo que ocurre con la variante clásica, que se visibiliza después de seis días.
Una vez dentro de las células puede replicarse mejor, así lo demuestra la cantidad mucho mayor de virus SARS-CoV-2 (carga viral) en los hisopos nasales de las personas infectadas por la Delta en comparación con los observados en la primera oleada de la pandemia. Esto puede deberse a un proceso llamado formación de sincitios, en el que las células infectadas se fusionan con sus vecinas normales, lo que ayuda al virus a esconderse del sistema inmunitario y a replicarse más rápidamente.
La variante Delta pudiera hacer grupos más grandes, lo que le ayuda a crear más copias potencialmente infecciosas. Una mayor carga viral también significa que una persona infectada puede exhalar más partículas del virus, lo que le da más posibilidades de encontrar a su próxima víctima. Todo esto conduce a una "aptitud" mucho mayor que la hará siempre más rápida que cualquier tasa de vacunación.
una infección de alto riesgo
Las infecciones de alto riesgo no son sorprendentes, sabíamos que las vacunas nunca eran 100% eficaces contra una infección y, en este sentido, las variantes están erosionando su eficacia en este escenario. El virus infecta a las personas a través del revestimiento de sus vías respiratorias, también conocido como las membranas mucosas. Estas zonas pueden no tener tantos anticuerpos de la vacuna, lo que da al virus un pequeño punto de apoyo. Pero una infección por sí sola puede no ser motivo de preocupación en personas vacunadas.
La eficacia de las vacunas contra la enfermedad grave y la hospitalización sigue siendo muy alta, independientemente de la variante; sin embargo, Delta puede ser la responsable del aumento en las hospitalizaciones en algunas poblaciones con bajas tasas de vacunación.
Si las personas vacunadas contraen una infección, su sistema inmunitario responderá y provocará algunos de los síntomas a los que estamos acostumbrados con otras infecciones como los resfriados, dolor de cabeza, congestión nasal y dolor muscular/articular. Distintos a los síntomas usuales de covid.
Evidentemente, las personas no son iguales entre sí: algunas tendrán una respuesta de anticuerpos mucho más fuerte que otras a una vacuna, y la respuesta de su sistema inmunitario a una infección también será diferente, lo que se traduce en distintos síntomas parecidos a los del resfriado o la gripe.
Con el tiempo la disminución de los niveles de anticuerpos en algunas personas que empezaron con una respuesta inmunitaria más débil podría permitir una infección leve.
Preocupación por los casos de infección leve
Si se contrae una infección leve se puede transmitir a alguien que no esté protegido, aunque los estudios muestran que esta transmisión es menor en las personas vacunadas. Aunque existe el riesgo de que se produzca una nueva mutación en el virus, esto es menos probable porque la replicación del virus y la duración de la infección son tan cortas que puede no tener tiempo suficiente para evolucionar.
Una cuestión importante es si las personas vacunadas con infecciones leves tienen el mismo riesgo de covid largo.
Precauciones a tomar, estando vacunado o no
Cortar las cadenas de transmisión es prevenir infecciones y enfermedades causadas por dicha variante y otras como la Lambda (llamada también "andina") o la Gamma (aparecida en Brasil), también ayuda a evitar la aparición de variantes nuevas y potencialmente más peligrosas, porque a medida que el virus pasa a una nueva persona, aumentan las posibilidades de que se produzca una mutación.
Llevar dos mascarillas cuando salga a zonas públicas como transporte público, supermercados y centros comerciales donde no conoce el estado de vacunación de la gente y procurar la higiene de las manos con alcohol 70%.
Mantener atención si tiene amigos cerca, asegurarse de saber quién está vacunado y quién no, y decidir con base en ello si viaja al interior o al exterior. Seguir sin comer dentro de los restaurantes y evitar los espacios concurridos en la medida de lo posible.
Se desconoce cómo se comporta la Delta en las personas mayores y cómo evoluciona su inmunidad con el tiempo; deberíamos ser prudentes mientras lo averiguamos.
La percepción es que los niños no contraen enfermedades graves, lo cual es evidente hasta cierto punto, pero algunos son susceptibles de sufrir casos verdaderamente graves. En algunos casos, puede desarrollarse un problema conocido como síndrome inflamatorio multisistémico (MIS-C).
Muchos de los datos en términos de riesgo para los niños se basan en una época sin clases en aula y sin Delta, se corre el riesgo de que se produzca un aumento significativo de casos cuando los niños vuelvan a la escuela.