Hace diez años que Siria es el centro de una guerra brutal causada por mercenarios del Estado Islámico y otros grupos que los medios occidentales identifican como "rebeldes", en un estrategia financiada por Estados Unidos para intentar deponer el Gobierno de Bashar al Assad por la vía violenta.
La agencia de noticias Sputnik sintetizó los datos más relevantes sobre el transcurso de esta década de conflicto, destacando que el gobierno y el pueblo sirio se mantienen en pie y la gran mayoría del territorio del país ha podido ser liberado del control del terrorismo.
- El 15 de marzo de 2011 estallaron las protestas masivas en la República Árabe como parte de la Primavera Árabe.
- A finales de 2011, las protestas se transformaron en un conflicto armado entre las fuerzas gubernamentales y la oposición, que pretendía derrocar al presidente Bashar Assad. En algún momento, Damasco sólo controlaba el 8% del territorio del país.
- La oposición contaba con el apoyo de Tuquía, Qatar y Arabia Saudí. El entonces presidente de Estados Unidos, Barack Obama, también pidió a Assad que dimitiera.
- La situación se agravó por las actividades de las organizaciones terroristas, especialmente el Estado Islámico, que se apoderó de enormes territorios y proclamó un califato en las zonas controladas en Siria e Irak en 2014.
- En septiembre de 2014, la coalición internacional liderada por Estados Unidos comenzó a realizar ataques aéreos contra las posiciones del Estado Islámico sin mandato de la ONU ni permiso de Siria. El 20 de septiembre de 2015, Rusia comenzó a golpear al Estado Islámico tras la pertinente petición de Damasco.
- En diciembre de 2017, el presidente ruso Vladimir Putin declaró la victoria total sobre el Estado Islámico en Siria e inició la retirada de la mayoría de las tropas desplegadas en la república árabe. En 2019, el entonces presidente de Estados Unidos, Donald Trump, también anunció la retirada de la mayoría de las tropas de Siria. Sin embargo, los militares estadounidenses siguen controlando varios campos petrolíferos en el norte de Siria.
- El gobierno sirio ha recuperado el control de la mayoría de los territorios, excepto la provincia noroccidental de Idlib que se convirtió en un bastión de los militantes.
- El acuerdo político está en marcha: a través del proceso de Astana dirigido por Rusia, Turquía e Irán, así como el proceso de Ginebra bajo la égida de las Naciones Unidas. El 30 de enero de 2018, la ciudad turística rusa de Sochi acogió el Congreso de Diálogo Nacional en el que participaron representantes de diferentes fuerzas políticas. Los participantes acordaron crear un comité que preparará una reforma constitucional.
- La guerra dejó más de 200.000 muertos, según las estimaciones de la ONU. Unos 12 millones de personas se convirtieron en refugiados, pero más de 2 millones ya han regresado a sus hogares.