El mundo podría enfrentar una crisis de suministros tras las escasez de diésel debido a que las capacidades de refinación son limitadas y se están agotando las reservas, justo cuando se acerca el invierno en Norteamérica y Europa. La crisis sería total en tanto que este combustible es esencial para el transporte en general, las industrias y los hogares.
"Dentro de unos meses, casi todas las regiones del planeta enfrentarán el peligro de una escasez de diésel justo cuando la escasez de suministro en casi todos los mercados del mundo ha empeorado la inflación y perjudicado el crecimiento", advierte Bloomberg, recoge Zero Hedge.
El impacto económico del aumento de los precios del diésel y la escasez en todo el mundo tendría efectos catastróficos en tanto que aceleraría la inflación que ya registra alzas históricas. De acuerdo a Mark Finley, becario de energía del Instituto Baker de Políticas Públicas de la Universidad de Rice, los precios elevados del diésel podrían costarle a la economía estadounidense 100 mil millones de dólares.
Los inventarios de diésel en los Estados Unidos para esta época del año están en los niveles más bajos de la historia. Actualmente el país solo cuenta con suministro de diésel para 25 días, y se estima que la escasez persistirá hasta que se produzca una recesión en la economía.
Si bien la guerra de Ucrania causó el aumento de los precios del diésel, esto es parte de un proceso que se viene cocinando lentamente en todo el mundo, según algunos analistas. En cuanto a Europa, se espera que los inventarios caigan aún más después de que entren en juego las sanciones de crudo y productos crudos rusos en los próximos meses.
Sin duda alguna, esta es la mayor crisis de diésel que se ha visto en años, y la mala noticia es que el invierno podría exacerbar los problemas para los países atlantistas.