Este martes 8 de agosto, los representantes de los países que comparten la región amazónica se reunieron para acordar trabajo conjunto en la conservación de la mayor selva tropical del mundo. En este primer encuentro, convocado por el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, se establecieron varios compromisos con vistas a frenar la deforestación impulsada por la agricultura industrial y el acaparamiento de tierras.
La Declaración de Belém, por la ciudad brasileña donde se celebró la reunión, fue firmada por los miembros de la Organización del Tratado de Cooperación Amazónica (OTCA), constituida por Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, Guyana, Perú, Surinam y Venezuela.
A continuación, los principales puntos de la declaración:
- Sumar esfuerzos para avanzar en una agenda común de cooperación en la Amazonía, que se implemente bajo los principios de desarrollo sostenible de la biodiversidad, los bosques y el agua.
- Combatir la deforestación y las actividades ilícitas en la región.
- Promover el desarrollo económico con inclusión social, sobre todo tomando en cuenta las comunidades indígenas, locales y tradicionales.
- Fortalecer la OTCA y la ampliación de sus espacios de coordinación, cooperación y medios de implementación.
- Fortalecer la cooperación regional para el desarrollo a través del establecimiento de un Grupo de Trabajo sobre cooperación Sur-Sur dentro de la OTCA con el propósito de coordinar, articular y racionalizar mejor la cooperación para el desarrollo y las actividades de los órganos responsables de la cooperación de los Estados Partes, en favor de la Amazonía, especialmente en las zonas fronterizas.
- Incentivar la recuperación, ampliación y consolidación de la infraestructura de investigación científica y tecnológica en la Amazonía.