La vicepresidenta Delcy Rodríguez ha emitido una declaración enérgica y contundente en respuesta a las acciones de la empresa ExxonMobil. En sus palabras, denuncia la actitud amenazante de la transnacional energética hacia Venezuela y su soberanía sobre el territorio en disputa del Esequibo.
Venezuela rechaza declaraciones amenazantes del pdte de la Exxon Mobil, Alistair Routledge. Esta trasnacional energética no solo se subroga la soberanía de Guyana, gobierna a las altas autoridades de ese país, alienta la ilegítima vía de la Corte Internacional de Justicia en… pic.twitter.com/eZ0mHLFm3j
— Delcy Rodríguez (@delcyrodriguezv) February 7, 2024
Rodríguez acusa a ExxonMobil de pretender amparar operaciones ilícitas en una zona marítima pendiente de delimitación, bajo la influencia hostil de Estados Unidos y en complicidad con Guyana. Esta situación pone en riesgo la estabilidad de la región y desafía el principio de respeto a la soberanía de los Estados.
Además, recuerda las acciones injerencistas previas de la transnacional estadounidense y la actitud pasiva y subordinada de Guyana, al influir la primera en las autoridades de la segunda y alentar la vía de la Corte Internacional de Justicia en detrimento del Acuerdo de Ginebra. Esta postura, según la vicepresidenta, viola los Acuerdos de Argyle y la legalidad internacional, lo que evidencia un desprecio por el marco normativo establecido para resolver conflictos territoriales.
Por su parte, el ministro de Defensa venezolano, Vladímir Padrino López, ha advertido que cualquier incursión en el espacio marítimo venezolano será respondido de manera proporcional, contundente y conforme a la legalidad.
Si la ExxonMobil cuenta con una compañía de seguridad privada representada por el Comando Sur y una pequeña sucursal en el gobierno de Guyana, bien por ellos, pero en el espacio marítimo que por derecho es de Venezuela ¡Recibirán una respuesta proporcional, contundente y apegada… https://t.co/FjJzqFOr1K
— Vladimir Padrino L. (@vladimirpadrino) February 7, 2024
Los altos funcionarios venezolanos respondieron así a las declaraciones del presidente de ExxonMobil, Alistair Routledge, quien afirmó que las alianzas militares entre Guyana y Estados Unidos eran un "buen augurio", como si se tratase de un ejército privado que le garantiza protección para saquear recursos energéticos.
"Creo que la colaboración que estamos viendo para Guyana con otros países en el frente militar y también en el frente diplomático y económico refleja eso. Entonces, creo que es algo saludable, creo que es bueno para el hemisferio occidental que veamos ese tipo de cooperación y, con suerte, continuará", dijo Routledge.
En el artículo que reseña la noticia, agrega que la corporación, después de que el gobierno venezolano tomara medidas para defender la Guayana Esequiba y llevarla a un referéndum consultivo, se vio obligada a reunirse con compañías de seguros y financiación para intentar reducir la incertidumbre causada por la revelación de que sus operaciones en la fachada atlántica no eran legales, utilizando el nulo e írrito Laudo Arbitral de 1899 como justificación.
Estas declaraciones, sin duda, añaden un nuevo capítulo a las hostilidades y amenazas contra la soberanía venezolana y, al mismo tiempo, confirman que el asunto con el Esequibo no se está dirimiendo entre dos Estados soberanos, sino entre Venezuela e intereses transnacionales asentados en Guyana.