El martes 17 de octubre en la madrugada, el hospital Al-Ahli en la Franja de Gaza fue atacado con una bomba pesada que mató a más de 800 personas que se encontraban en el recinto, cifra que podría aumentar cuando se remuevan todos los escombros.

Las pruebas revelan que se trata de un ataque israelí, pero estos culparon a la Yihad Islámica Palestina del brutal atentado. Sin embargo, el poder destructivo de la bomba-misil y la forma como lanzada indican que provino de Israel, además de otras evidencias.

• Horas antes del ataque Israel había "advertido" de que iba a bombardear dicho hospital y "pidieron que fuera desalojado". Ese hospital, donde había miles de refugiados, ya había sido bombardeado previamente por Israel de acuerdo con otros reportes.

Algunos medios señalan que se trata de una munición Mark 84 (MK-84) de fabricación estadounidense y fue lanzada en caída libre desde un avión tipo caza, aeronave con la que no cuentan los grupos de resistencia palestina.

La confirmación llegó por parte de Sait Ersoy Bereketlioglu, director de la empresa Troy Technology Defense, que se ocupa de las técnicas de producción de ojivas, microcohetes y productos químicos altamente explosivos de grado militar. Detalló para el medio turco Anadolu que las señales de la llegada de la munición al hospital, el sonido y la intensidad de la explosión indican que podría tratarse de una bomba MK-84 de 2 mil libras y no de un cohete, armamento en el arsenal de Hamás y Yihad Islámica.

Esto ensancharía el expediente de crímenes de guerra y de lesa humanidad que ha llevado a cabo Israel contra la población palestina en Gaza en lo que va de octubre.