Desde que empezó la operación militar rusa en Ucrania se han ido revelando nuevos detalles de la participación directa de Estados Unidos en la guerra. A pesar de haberlo negado en un principio, se confirmó que unidades paramilitares de la CIA entrenaron a francotiradores ucranianos.
Ex funcionarios de inteligencia dijeron a YahooNews que la misión, lanzada en 2015, tenía como objetivo preparar a las fuerzas especiales ucranianas para soportar la presión militar rusa y evaluar su capacidad para la lucha. La formación incluía instrucción en armas de fuego, técnicas de camuflaje y comunicaciones encubiertas.
Los oficiales de la CIA creen que el hecho de enviar francotiradores "no va a ser algo que realmente afecte al espacio de batalla". Además, no contaron con que las fuerzas rusas empezaron a localizarlos utilizando el resplandor de los cristales, y les disparaban láseres de alta energía, dañando la vista de los francotiradores.
Los paramilitares de la CIA pronto llegaron a la conclusión de que la agencia se enfrentaba a un adversario cuyas capacidades superaban con creces todo lo vivido anteriormente.
La operación se llevó a cabo con total discreción para evitar la “ira de Rusia”. Según un funcionario, el programa de la CIA funcionó durante años, pero cuando la amenaza de una invasión rusa a gran escala se hizo cada vez más aguda el mes pasado, la administración Biden sacó a todo el personal de la CIA del país, incluidos los paramilitares de la agencia.