Contrario a la esperanza de que se redujera la expansión de la industria petrolera en zonas de tierras y aguas públicas en Estados Unidos, es posible que algunos electores de Joe Biden se sientan defraudados por otra promesa incumplida.
Y es que, contrario al compromiso de cumplir con las políticas sobre el cambio climático, adquirido durante la campaña, el actual presidente estadounidense dio luz verde a más perforaciones que su antecesor Donald Trump en 2017, durante su primer año de mandato, refiere una reportaje de Jerri-Lynn Scofield publicado en Naked capitalism.
El aumento es del 34% en relación con la administración anterior, según un análisis del Centro para la Diversidad Biológica. En total son 3.557 permisos para la perforación de petróleo y gas en tierras públicas otorgados por Biden en 2021. En el primer año de Trump se entregaron 2.658 permisos de perforación.
En noviembre del año pasado, el gobierno de Biden llevó a cabo una subasta de 80 millones de acres del lecho marino del Golfo de México a las empresas petroleras y de gas que más pujaran, una acción irresponsable según los ecologistas. Dicha subasta se realizó unos días después de que el presidente estadounidense manifestara el supuesto compromiso de su gobierno con la descarbonización en la cumbre del clima COP26.
La extracción de combustibles fósiles en tierras y aguas públicas representa actualmente una cuarta parte de las emisiones de gases de efecto invernadero de Estados Unidos. A pesar de sus promesas en Glasgow, esta administración sigue permitiendo que esa producción se expanda. ¿Este es el capitalismo verde del que se vanagloria los demócratas estadounidenses?