El ejército ucraniano ha disparado múltiples cohetes directamente contra los sistemas de refrigeración y el sitio de almacenamiento de desechos nucleares dentro de la planta de energía nuclear de Zaporiyia en Energodar, dijo el martes 16 de agosto a los medios rusos el miembro de la administración del gobierno local, Vladimir Rogov.
El funcionario advirtió que un ataque exitoso podría ocasionar una catástrofe. "Uno de los misiles guiados golpeó a solo diez metros de los barriles con combustible nuclear gastado", dijo a Soloviev Live.
Cualquier golpe al sitio de almacenamiento resultaría en la liberación de desechos nucleares que van desde decenas a cientos de kilogramos y la contaminación del área, explicó el funcionario. "En lenguaje sencillo, eso sería como una bomba sucia", señaló Rogov.
Si bien el reactor en sí solo puede destruirse con un arma nuclear táctica, los sistemas de refrigeración y el almacenamiento de desechos son mucho más vulnerables y su daño podría causar fácilmente un desastre, explicó el funcionario.
Asimismo, señaló que si las las tropas ucranianas siguen disparando proyectiles pesados contra los sistemas de refrigeración podrían causar un colapso mayor que el episodio de 1986 en Chernobyl.