Bloomberg calculó cuánto sería el impacto en la economía global si el conflicto por Taiwán escala a una guerra que involucre a China y Estados Unidos. El medio estima el precio en alrededor de 10 billones de dólares, aproximadamente 10% del PIB mundial, lo que superaría la guerra en Ucrania, la pandemia y la crisis financiera mundial.
Esta proyección la hace a partir de los escenarios que podrían vislumbrarse tras la influencia militar y económica que ha adquirido China, la negación de Taiwán a querer formar parte de "Una Sola China" y las tensas relaciones entre Beijing y Washington.
De concretarse esta guerra, el suministro de semiconductores se vería seriamente comprometido y desencadenaría interrupciones en las cadenas a escala global a causa de las sanciones comerciales y perturbaciones en los mercados financieros. Recordemos que Taiwán es un gran proveedor de semiconductores, vitales para la industria moderna, y su ausencia en el mercado provocaría escasez.
Estiman que la mayor perjudicada sería Taiwán, ya que su economía quedaría devastada y su PIB tendría una disminución de 40%. En el caso de China, las sanciones y la escasez disminuiría su PIB 16,7%.
Sin embargo, los daños colaterales se extenderían más allá de los países implicados. En Corea del sur, por ejemplo, su PIB caería 23,3%, y en el caso de los países del sudeste asiático sería de 20%. Por fuera de la región las consecuencias se sentirían en Estados Unidos, cuya ausencia de los semiconductores taiwaneses vería caer su PIB en 6,7%.
No se sabe qué tan cerca está ese escenario, pero de acuerdo con Bloomberg muchas empresas y países se están preparando con antelación para una posible escalada con el objetivo de minimizar posibles pérdidas y reducir sus propios riesgos. El 13 de enero se llevarán a cabo unas elecciones que podrían avivar el conflicto, ya que el oficialista y actual vicepresidente, Lai Ching-te, podría generar turbulencias si gana los comicios.