Douglas Macgregor, alto funcionario del Departamento de Defensa de los Estados Unidos, quien recientemente fue instalado en el Pentágono por partidarios leales del magnate presidente Donald Trump, ha sido criticado por decir que los políticos estadounidenses se vuelven "muy, muy ricos "apoyando a Israel, con organizaciones pro-israelíes, siendo calificados sus comentarios de "antisemitas".
Macgregor, un coronel del ejército retirado, afirmó sin rodeos que los políticos que apoyan a Israel solo se mueven por el dinero, y que el lobby pro-israelí en Estados Unidos está tratando de arrastrar a ese país a la guerra.
Macgregor fue nombrado asesor del nuevo secretario de Defensa interino de Trump, Christopher Miller. Su nombramiento es parte de una purga de líderes profesionales y no partidistas en el Departamento de Defensa, y su reemplazo por fervientes leales a Trump, que ha tenido lugar desde que se proyectó que Trump perdió las elecciones presidenciales ante Joe Biden la semana pasada.
Las declaraciones de Macgregor sobre la influencia del lobby pro israelí en los Estados Unidos fueron reportadas por primera vez el viernes por CNN. La cadena citó una entrevista que Macgregor concedió el año pasado, en la que dijo que el secretario de Estado Mike Pompeo "tiene las manos extendidas por dinero del lobby israelí, los saudíes y otros".
Hablando sobre el exasesor de seguridad nacional de Trump, John Bolton, quien al igual que Pompeo es un firme partidario de la derecha israelí y los asentamientos coloniales en Palestina, Macgregor dijo: "El sr. Bolton se ha vuelto muy, muy rico y está en la posición que ocupa gracias a su apoyo incondicional al lobby israelí. Él es su hombre en el terreno, en la Casa Blanca".
Cuando se le preguntó si los políticos que son conocidos por su apoyo a Israel, como el senador Lindsey Graham, quieren ir a la guerra con Irán, Macgregor respondió: "Tienes que mirar a las personas que donan a esos individuos".
Añadió que AIPAC, la mayor organización de lobby pro-israelí, tiene "enormes cantidades de dinero que durante muchos años han cultivado una enorme influencia en el poder en el Congreso".
Los comentarios de igual manera visibilizan que la política exterior de Estados Unidos está íntimamente ligada a la de Israel, por intereses estratégicos.