Casi un cuarto de millón de personas han muerto en la guerra impuesta de Yemen, dijo el martes 1° de diciembre la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA, sus siglas en inglés) en su sitio web, confirmando el enorme número de víctimas de un conflicto que ha devastado la economía de Yemen y ha creado la peor situación humanitaria del mundo.
"La guerra ya había causado un estimado de 233 mil muertes, incluidas 131 mil por causas indirectas como falta de alimentos, servicios de salud e infraestructura", afirmó la ONU.
Agregó: "Las hostilidades han causado directamente decenas de miles de víctimas civiles; se verificaron 3 mil 153 muertes infantiles y 5 mil 660 niños en los primeros cinco años del conflicto, y se reportaron 1 mil 500 víctimas civiles en los primeros nueve meses de 2020".
La oficina también dijo que el conflicto se había intensificado este año, con 47 líneas de frente identificables a fines de octubre, frente a las 33 a principios de este año.
La guerra en Yemen comenzó en 2015, a la vez que Arabia Saudí y Estados Unidos impusieron enfermedades, hambre y colapso económico a una población ya empobrecida. En 2020, la violencia se intensificó y las dificultades se agravaron con lluvias torrenciales, una crisis de combustible, covid-19 e infestaciones de langostas del desierto que se espera que causen daños y pérdidas por valor de 222 millones de dólares en cultivos básicos, animales y ganado.
OCHA está solicitando 3.4 mil millones de dólares para Yemen, parte de un llamamiento humanitario general de 35 mil millones de dólares que lanzó el mismo martes ante lo que han llamado una "catástrofe inminente".