Mié. 16 Octubre 2024 Actualizado ayer a las 4:54 pm

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La oposición está fragmentada por "diferencias irreconciliables" como las de Henrique Capriles y Julio Borges o la de Henry Ramos Allup con Bernabé Gutiérrez (Foto: Question Digital)
El ethos oportunista frente al dogmatismo del cambio de régimen

¿Qué se traen entre manos Capriles, Rosales y Ramos Allup?

La solicitud personal de asilo y salida del país del excandidato de la Plataforma Unitaria Democrática (PUD), Edmundo González Urrutia, fue un auténtico terromoto político y punto de inflexión para la constelación de figuras, organizaciones políticas y dirigentes que compone la galaxia del antichavismo. 

Desde ese momento, el quehacer de distintos líderes específicos va dando forma a un "momento opositor" marcado por desacoplamientos narrativos, déficit del factor unitario demostrado previo a las elecciones presidenciales y movimientos en dirección contraria al relato de conflicto catastrófico y existencial propalado por María Corina Machado.

Mientras la dirigente de Vente Venezuela, encapsulada en el activismo en redes sociales desde mediados de agosto, ha declarado que la lucha que encabeza se "está acelerando en diversos planos", lo que parece un déjà vu de la época de "máxima presión" de Trump y "todas las opciones sobre la mesa", el amplio paisaje opositor muestra signos contradictorios con este discurso. 

Pareciera que figuras del sector enfrentado históricamente a Machado comienzan a armar un juego en la búsqueda de alternativas a la inercia planteada: el ciclo de Edmundo González se asemeja cada vez más al fallido "proyecto Guaidó", en el que las altas expectativas de triunfo, luego de un lapso muy corto, abrieron paso a la inacción y al congelamiento de estrategias, enfoques y espacios de decisión en la coalición de partidos antichavistas que secundaron la maniobra al principio.

Capriles: "Diferencias irreconciliables"

Más allá de algunos posts en solidaridad con González Urrutia y denuncias sobre el supuesto acoso a la embajada argentina, el excandidato y exgobernador del estado Miranda no se había pronunciado de manera relevante hasta la semana en curso.

El 23 de septiembre Capriles formalizó su renuncia a la junta directiva de Primero Justicia (PJ) mediante un comunicado con fecha del 20. Expuso que su salida "se fundamenta en la pérdida de visión de esta junta, en la falta de unidad interna y una conducción colegiada".

Su decisión se basó "en la existencia de diferencias irreconciliables entre gran parte de nosotros con un grupo interno de esta propia junta", y en que el partido se ve debilitado por los manejos de su cúpula que, según sus argumentos, "no tiene un plan claro ni una política sólida que abra caminos democráticos al país". También denuncia manejos de cogollo de quienes quieren "imponer sus intereses".

Según el análisis desde la acera opositora, su confrontación con el fugitivo Julio Borges ha escalado al punto de acusarlo de "uso pagado de redes y portales para atacar y desprestigiar" tanto a su persona como a otros dirigentes. El líder de PJ, "excanciller" del gobierno fake de Guaidó, se ha mantenido como una figura activa en la promoción del golpe de Estado en Venezuela desde el extranjero. 

La distancia del también exalcalde del municipio Baruta ya era apreciable en sus redes sociales, a través de las cuales no se ha evidenciado un apoyo contundente a Machado, sino generalidades como la celebración de las medallas obtenidas por la selección venezolana en los Juegos Paralímpicos y la exigencia de excarcelamiento del dirigente opositor Biagio Pilieri.

Cabe recordar que sobre Pilieri cursan acusaciones de "usurpación de funciones que son propias del ente rector en materia electoral y tener como fin generar caos y zozobra", según reza en la denuncia del Ministerio Público al avisar, antes de las elecciones del 28 de julio, lo que la oposición haría mediante una página web.

Sin mayor incidencia en la política concreta, Capriles se ha dedicado a criticar el gobierno ante una situación económica nacional compleja, producto de la falta de ingresos públicos por efecto de las sanciones ilegales contra la economía y la industria petrolera nacional. 

Rosales: "firmeza, madurez y altura política"

El gobernador del estado Zulia se ha mantenido en labores inherentes a su cargo. En su cuenta en X no aparecen posts sobre la diatriba política nacional desde el 2 de septiembre, cuando rechazó la orden de aprehensión emitida por un tribunal contra González.

En línea con la PUD, el también excandidato presidencial afirmó que "de esta forma no vamos a dilucidar la controversia en el país" y sugirió que la medida podría intensificar las tensiones políticas en el contexto nacional.

Opinadores de la oposición vincularon a Rosales, líder del partido Un Nuevo Tiempo (UNT), con la propuesta de candidatura de González como factor de consenso ante la falta de apoyo del resto de la PUD.

En aquella ocasión Omar Barboza, secretario de UNT y ejecutivo de la PUD, manifestó: "Una buena noticia para el pueblo de Venezuela: la Plataforma Unitaria Democrática, por unanimidad, acaba de aprobar la candidatura del embajador Edmundo González Urrutia como el postulado por la unidad, apoyado por todos los factores de la plataforma. Luego de un debate de altura, respetuoso, en el que participaron líderes como María Corina Machado y Manuel Rosales. Llegamos a una conclusión que es una decisión histórica para la democracia de Venezuela: hemos escogido al próximo presidente de la República, que va a ser electo el 28 de julio".

El exembajador había sido provisionalmente inscrito ante el Consejo Nacional Electoral (CNE) para que la tarjeta de la Mesa de la Unidad Democrática —ahora PUD—, no quedara fuera de la contienda.

Sin embargo, Rosales mantuvo una participación discreta durante la campaña electoral y, debido a que UNT participó con su tarjeta en los comicios, fue citado por la Sala Electoral del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) a propósito del recurso contencioso electoral interpuesto por el presidente y candidato ganador, Nicolás Maduro.

Como es sabido, González no acudió a la citación emitida por dicha sala y, al ser interrogado sobre las evidencias del supuesto triunfo del candidato opositor, Rosales señaló que "no tenemos que presentar nada adicional" y agregó que ya la PUD había realizado la publicación y difusión de las actas a través de una página web.

En un desmarque, también discreto, de la mencionada página, reconoció y exigió que el CNE cumpliera sus competencias en cuanto a la publicación de los resultados oficiales. También ha insistido en la necesidad de "firmeza, madurez y altura política" en la defensa de los resultados y en que "nada ni nadie perturbe este histórico esfuerzo".

Entretanto, sigue enfocado en sus funciones de gobierno, evitando cualquier mención, aunque sea indirecta, a las convocatorias de María Corina Machado o a Edmundo González. 

Henry Ramos Allup: Entre efemérides y pésames

Respecto a la política nacional, el expresidente de la Asamblea Nacional electa en 2015, Henry Ramos Allup, ha mantenido un perfil bajo.

Sus declaraciones a la prensa han sido casi inexistentes y en su cuenta X solo aparecen republicaciones respecto a la agenda mediática opositora, como la solicitud de excarcelamiento a supuestos presos políticos.

La narrativa mediática sobre los dirigentes detenidos obvia su eventual participación intelectual en agresiones violentas como la ocurrida en Carora. El director de gobierno de la alcaldía, Endrick Medina, fue detenido como sospechoso. Mientras que el alcalde, Javier Oropeza, salió del país para dejar un vacío de poder que fue resuelto por la Cámara Municipal al designar a Iraida Timaure como alcaldesa encargada.

Su partido, Acción Democrática (AD), atraviesa un proceso de división como PJ, del otro lado está la facción que apoya al exgobernador del estado Amazonas, Bernabé Gutiérrez. Este ha declarado que Ramos no volvería a formar parte del partido tras haber participado en el Plan Guaidó y en el golpe de abril de 2002. Ambas acciones derivaron en un saldo político negativo para el antichavismo.

Entre efemérides y pésames, la cuenta del líder de "AD en resistencia" ha obviado un posicionamiento respecto a la huida de González, lo mismo en relación a las declaraciones de Machado sobre el proceso postelectoral que ha asumido.

Su última publicación enfocada en dicho proceso fue hace poco más de un mes, cuando desestimó la decisión del TSJ respecto al resultado electoral del 28J. Allí declaró que el máximo tribunal "no está por encima" de la voluntad que se expresó el 28 de julio y "no puede cambiar" eso.

¿se prepara una jugada contra maría corina machado?

Ninguno de los dirigentes inscritos en este breve análisis se ha plegado de manera contundente a la agenda de conflicto existencial y acoso económico y diplomático de María Corina Machado. Los partidos aglutinados en la PUD han avanzado en declaraciones generales de respaldo a sus posiciones, sin embargo ningún otro alto dirigente las ha tomado como un ejercicio de militancia activa. 

Por otra parte, excepto UNT, la fragmentación de los partidos de oposición es evidente, lo que deja a sus seguidores sin referentes claros de opinión o acciones políticas concretas.

Desde abril de 2002 hasta ahora, las aventuras asumidas por el sector extremista de la oposición han llevado a la debacle a todo un sector de la política cuya agenda no se determina dentro del territorio nacional. De allí la demanda de Rosales respecto a la "altura y madurez política", la disidencia de Capriles de su partido y, en cierto punto, la equidistancia de Ramos Allup.

En política, como bien sabemos, no existen las casualidades. No parece descabellado que estas tres figuras, con comportamientos e intereses inmediatos diferentes pero que convergen en el distanciamiento público con Machado y sus aliados más cercanos, estén creando el campo de oportunidad para que los costos del fracaso de una nueva operación de cambio de régimen recaigan únicamente en la fundadora de Vente Venezuela. Están dando un mensaje, cada uno a su manera.

Con paciencia y sentido de oportunidad —y oportunismo— esperan que el derrumbe de Machado ocurra, para luego ser quienes rebarajen las cartas. Hay elecciones regionales y parlamentarias el próximo año, ambas definirán el equilibrio de poder en la política nacional hasta el año 2030, y con base en esa proyección cada político busca la forma de "doblarse para no partirse", como bien resumió Ramos Allup, hace algunos años, el ethos pragmático y calculador de los políticos profesionales de la vieja guardia antichavista.

El fanatismo de la intervención extranjera y el dogmatismo de la "máxima presión" les ha costado demasiado. 

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