La XXIII cumbre de jefes de Estado y gobierno de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP) se llevó a cabo el 24 de abril en el Palacio de Miraflores. Lo que inició como una articulación de gobierno y pueblos ante el neoliberalismo en 2004 se ha convertido "en una gran alianza para la vida de nuestros pueblos", refirió el presidente venezolano, Nicolás Maduro.
"El ALBA ha demostrado una gran capacidad para estar en el centro de la verdad, por el derecho de los pueblos al desarrollo, a la independencia, a la paz, a la democracia, a la libertad, a la soberanía, en fin, al derecho a la vida", señaló, y destacó que en 20 años el bloque ha demostrado su carácter vanguardista.
Previo al encuentro —dijo el Presidente— se hizo una reunión privada en la que se discutió una agenda común que se adapta a los nuevos escenarios que están por venir, un espacio donde se habló de objetivos superiores a alcanzar en cuanto a lo geopolítico, lo económico, las finanzas, la salud, la producción, entre otros.
Señaló que, si bien la integración era importante, había que trascender y elevarla a un nivel superior apelando al sueño original de nuestros libertadores. Es por ellos que llamó a tener la voluntad política de pasar de una comunidad de Estados a una confederación de pueblos, gobiernos de América Latina.
Asimismo, el presidente Maduro lanzó la Agenda 2030 del Alba con metas a cumplirse a corto, mediano y largo plazo. El documento que contiene siete ejes de acción fue discutido y aprobado antes de la plenaria por los jefes de Estado miembros del grupo.
Las siete líneas de acción de la Agenda ALBA 2030 son las siguientes:
- Creación de una agencia de cooperación y desarrollo del ALBA-TCP.
- Estudiar y aprobar el plan de relanzamiento de Petrocaribe.
- Aprobación del plan ALBA Alimentos.
- Firmar y adoptar definitivamente el Tratado de Comercio de los Pueblos.
- Impulsar un programa especial de desarrollo científico, cultural, comunicacional y académico compartido.
- Relanzar el plan ALBA Salud.
- Creación de una agencia del ALBA para la mitigación de los impactos del cambio climático.
Como uno de los ejes principales, se propuso la creación de una agencia de desarrollo que tendrá como objetivo recaudar fondos para proyectos. Asimismo, se habló sobre el relanzamiento de Petrocaribe, programa interrumpido por las sanciones de Estados Unidos contra Venezuela.
Sobre el plan de inversión en materia alimentaria, se propuso la creación de planes conjuntos para el uso de semillas, fertilizantes y maquinaria agrícola orgánicos. Se prevé que el bloque se transforme en una "zona de comercio justo" y que los países sean complementarios en diferentes sectores de la economía, principios del mundo multipolar.
En cuanto al desarrollo científico, cultural y comunicacional se discutió el relanzamiento del programa ALBA Salud, con formación de médicos, enfermeros y avances en la creación de una agencia para mitigar el cambio climático.
Además del presidente Nicolás Maduro, que fungió como anfitrión de la cumbre, estuvieron presentes Gastón Browne (primer ministro de Antigua y Barbuda), Ralph Gonsalves (primer ministro de San Vicente y las Granadinas), Daniel Ortega (presidente de Nicaragua), Miguel Díaz-Canel (presidente de Cuba), Roosevelt Skerrit (primer ministro de Dominica), Luis Arce (presidente de Bolivia), Phillip J. Pierre (primer ministro de Santa Lucía), Joseph Andall (canciller de Granada) y Norgen Wilson (embajador de San Cristóbal y Nieves en Venezuela).
La exposición de la Agenda de Desarrollo 2030 representa no solo la apuesta por profundizar el relacionamiento de los países intrabloque, sobre todo en el ámbito económico-comercial, algo que se viene tratando de realizar —sin consolidarlo— desde principios de la década del 2010, con todo el impulso que recibió el Sistema de Compensación Regional (Sucre) como moneda de intercambio del mecanismo de integración; sino también el empeño e importancia que la República Bolivariana le otorga al Caribe como zona geopolítica estratégica en momentos cuando un actor de importancia en la zona, como lo es la República Cooperativa de Guyana, quiere dañar la imagen que Venezuela ha venido construyendo en ese espacio geográfico vital para sus intereses nacionales.