El presidente electo de Argentina, Javier Milei, prometió durante su campaña electoral deslastrarse de la clase política de su país, a la que ha llamado "la casta".Sin embargo, algunas decisiones tempranas denotan lo contrario.
Argentina ha atravesado distintos ciclos político-económicos que han derivado en procesos de acumulación de poder en favor de las élites financieras nacionales y globales. Los bancos definen su rumbo y esto se ha logrado mediante ajustes neoliberales como los instrumentados por el entonces presidente Carlos Ménem (1989-1999), así como con Mauricio Macri (2015-2019), en acuerdos con bloques e instituciones transnacionales que han participado de la desconfiguración del Estado.
Buscando relanzar ese proceso, Milei dijo que procurará privatizar la petrolera nacional Yacimientos Petrolíferos Fiscales (YPF), asimismo medios públicos como la TV Pública, Radio Nacional y Télam. Luego de su victoria, el autodenominado libertario encabezó una campaña de entrevistas radiales en las que definió su deseo de vender empresas estatales.
Además de anticipar que viajará a Estados Unidos y a Israel antes de asumir la presidencia, aseguró que "todo lo que pueda estar en las manos del sector privado, va a estar en las manos del sector privado". Esta frase es un juego de palabras que recuerda al famoso operador de Ménem, Roberto Dromi, quien en la embestida privatizadora de 1989 anunció de manera "errónea" que "nada de lo que deba ser del Estado seguirá en manos del Estado".
A raíz de aquel "lapsus", el Estado argentino se descapitalizó, los miles de millones de la venta de las empresas no se usaron para terminar con el lastre de la deuda externa sino que sirvieron para sostener, en un fuerte proceso de endeudamiento, el flujo de dólares que garantizaran el experimento de la convertibilidad.
Luego de la primera vuelta para la elección presidencia hubo un proceso de simbiosis entre el grupo político de Milei, quien fue el segundo más votado, y la candidata de Juntos por el Cambio, Patricia Bullrich, quien quedó fuera del balotaje y fue patrocinada por Macri. Esto cerró la ráfaga de insultos de Milei contra ese sector de "la casta" y reconstruyó el mapa político en perjuicio del peronismo y de sectores de la Unión Cívica Radical.
Sin embargo, más allá de lo verbal, Milei ha comenzado a anunciar nombres para su gabinete. No se trata de rostros nuevos, como se verá a continuación.
Nicolás Posse será su jefe de gabinete
Ingresó en 2007 a la Corporación América, empresa de Eduardo Eunerkián, dueño de un conglomerado que incluye concesiones aeroportuarias, empresas agrícolas y medios de comunicación. Posse se destacó como CEO responsable de los Duty Free en los aeropuertos del magnate y luego estuvo a cargo de la dirección de proyectos en el fallido "Corredor Bioceánico Aconcagua" entre 2009 y 2017, una iniciativa para unir los océanos Atlántico y Pacífico a través de un corredor ferroviario de alta tecnología.
En 2016 asumió la gerencia del Aeropuerto de El Palomar, donde pudo ampliar su experiencia en el ámbito aeroportuario y, junto a Milei, exploró el sistema chileno de financiamiento de la obra pública. Esta experiencia compartida se convirtió en la base de su anhelo político, llevándolos al intento de replicar y adaptar el modelo en Argentina.
Durante la campaña, Posse fue director de equipos técnicos y estratega político, estuvo a cargo de la organización de áreas claves como Educación, Salud, Energía, Minería y Vivienda. Su rol fue central en el "armado político" de La Libertad Avanza (LLA), canalizando aportes económicos y siendo el enlace para financiar la campaña.
Una ficha del PRO en la "mesa chica": Santiago Caputo
Por "mesa chica" se entiende el entorno más cercano al presidente electo. En su discurso luego de conocerse los resultados electorales del domingo 19 de noviembre, el ingeniero Santiago Caputo fue nombrado por Milei antes que su vicepresidenta Victoria Villarruel, por ser considerado como arquitecto de la victoria en los comicios.
Caputo se sumó a la campaña de LLA en 2021 y se convirtió en mano derecha de Milei. Trabajó con el "gurú" de Macri, el ecuatoriano Jaime Durán Barba, operador de dos cuentas offshore en Islas Vírgenes Británicas. Su entorno familiar gira en el macrismo, es sobrino de Nicolás y Luis Caputo, aliados del expresidente creador de la megadeuda con el FMI, e hijo del expresidente de Colegio de Escribanos de la ciudad de Buenos Aires, Claudio Caputo.
Nicolás "Nicky" Caputo es dueño de la tecnológica Mirgor, cofundada con Macri, y Luis "Toto" Caputo, el exministro de Finanzas macrista, a quien apodaban como "el Messi de las finanzas" y terminó su gestión con un vacío de dólares de las reservas.
Por otra parte, Flavio, Hugo y Rossana Caputo, otros familiares de Santiago Caputo, quedaron involucrados por financiar a Jonathan Morel, uno de los cofundadores de la violenta organización Revolución Federal (RF). Desde su constructora se contrató el servicio de Morel como carpintero y los pagos millonarios que le hicieron coinciden con ataques de RF a dirigentes políticos, entre ellas Cristina Fernández.
Morel está procesado por incitar a la violencia colectiva junto a Leonardo Sosa, el otro cofundador de la organización que amenazó a la expresidenta.
Santiago Caputo trabajó con Santiago Nieto y Roberto Zapata, dos hombres del PRO que trabajaron de cerca en la campaña de Cambiemos en 2015.
Diana Mondino: la próxima canciller a favor de entregar Las Malvinas
La futura canciller argentina es Diana Mondino, quien comparó la homosexualidad con "tener piojos". La también economista, que propuso privatizar la obra pública, entre otras tareas del Estado, fue parte del directorio de grandes empresas como Pampa Energía, Standard & Poor's y Loma Negra, siempre en el ámbito privado.
Página/12 reseña que, a pesar de su espíritu privatizador, Mondino se graduó de licenciada en Economía en la Universidad Nacional de Córdoba y tiene formación en empresas y negocios tanto en España como en Estados Unidos. Avaló en varias oportunidades la "autodeterminación" de los habitantes de las Islas Malvinas, en línea con la histórica postura británica.
Con relación a esto último, en septiembre pasado declaró a The Telegraph que "no se puede imponer ninguna decisión a otras personas, ni a los argentinos ni a nadie. Ya no se pueden imponer decisiones, eso tiene que terminar". Agregó que "la decisión de los lugareños" solo puede ser matizada si el gobierno argentino "seduce" a los isleños con concesiones a los británicos, como por ejemplo dejar abierta la posibilidad a que Gran Bretaña "pueda hacer un uso razonable de los recursos que hay allí abajo".
También, de manera reiterada ha defendido la creación de un "mercado de órganos" alineada con el trabajo del Premio Nobel de Economía Alvin Roth, quien en 2012 fue reconocido por desarrollar un algoritmo para agilizar el sistema de trasplantes cruzados. Esto fue implementado en Estados Unidos, y logró que 30 pacientes recibieran los riñones de 30 donantes desconocidos durante cuatro meses en 17 hospitales de 11 estados.
Sin embargo, en 2018 el Consejo de Europa vetó la implementación del sistema impulsado desde Estados Unidos de "intercambio global de riñones" porque denunciaban que escondía el "tráfico de órganos humanos" y fomentaba el "riesgo de explotación" de individuos altamente vulnerables.
Seguridad social: "mano dura" con antecedentes de soborno
Las pensiones de los trabajadores estarán bajo la administración de Carolina Píparo, trabajadora social de 47 años que fue electa diputada provincial en 2017 y se anotó en las filas del liberalismo en 2021, luego de ser expulsada por el PRO a raíz del escándalo que protagonizó junto a su marido, tras atropellar a dos motociclistas en La Plata en 2017 y tratar de sobornarlos.
Será la titular de la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses), el organismo con el presupuesto más grande del Estado. Desembarcó en la política en 2010 tras un asalto mientras estaba embarazada; desde entonces se hizo fuerte en la agenda de la "mano dura".
Como segundo a bordo estaría Juan Manuel Verón, director de Inversiones en Principal Financial Group (PFG), una compañía multinacional en México. Participó en la última reforma del sistema previsional de ese país y se espera que sea el "cerebro" de la política de seguridad social en Argentina en los próximos cuatro años.
La reforma previsional mexicana validó la apropiación y utilización de los ahorros de los trabajadores de ese país en manos de entidades financieras, muchos de estos negocios orientados a transacciones con el propio "Estado mexicano", con la compra de bonos públicos.
Los ajustes realizados por el gobierno argentino saliente derivaron en la vulnerabilidad de unos 5,5 millones de jubilados (73%) que cobran la asignación mínima, cuyos haberes finales se componen de otros ingresos —bono de 55 mil pesos, prestación alimentaria Pami, etcétera— que el nuevo gobierno podría no renovar en enero de 2024.
La política interna (y la policía) a cargo de un veterano de "la casta"
Guillermo Francos estará al frente del Ministerio del Interior. Trabajó en el Banco Interamericano de Desarrollo como director. Es un funcionario público omnipresente en la historia argentina: durante las dictaduras de Roberto Marcelo Levingston y Alejandro Agustin Lanusse, entre 1970 y 1973, se desempeñó como secretario privado del Ministerio de Justicia, en las gestiones de Jaime Perriaux, Ismael Bruno Quijano y Gervasio Colombres.
Luego trabajó como abogado del Departamento de Asuntos Jurídicos del Ministerio de Justicia en la presidencia de María Estela Martínez de Perón entre 1974 y 1976, y entre 1976 y 1985 como Director del Instituto Nacional de Crédito Educativo.
Presidió hacia fines de la década de 1980 el Partido Federal, tras el fallecimiento de su fundador, Francisco "Paco" Manrique, y en 1996 fundó el partido Acción por la República junto a Domingo Cavallo, padre del "uno a uno" (1 peso por 1 dólar) que causó daños a la industria nacional y terminó en una profunda crisis de deuda. Este es uno de los economistas más admirados por Milei.
En 1985 Francos fue electo concejal de la Capital Federal hasta 1993, fue diputado nacional entre 1997 y 2000 y presidente del Banco de la Provincia de Buenos Aires durante la gobernación de Daniel Scioli. Se perfila como el operador político que hará las negociaciones con los gobernadores y tenderá los puentes necesarios para la aprobación de leyes.
Las políticas económicas ocasionarían convulsión social, como ya ha ocurrido en Argentina. Para lidiar con ello, ya Macri ha calificado de "orcos" a los manifestantes y ha anunciado que propiciarían el enfrentamiento social. Ello será tarea de Francos, quien estará a cargo de los cuerpos de seguridad.
Además, la vicepresidenta electa, negacionista de las desapariciones y torturas de las dictaduras militares, supervisará las áreas de Defensa y Seguridad Interior.
Un abogado mediático y delictivo en el ministerio de Justicia
Mariano Cúneo Libarona comenzó su incursión en los medios de comunicación cuando defendió a Guillermo Cóppola en el caso del jarrón con droga, en la década de 1990. También defendió a los cuñados de Carlos Ménem, Amira y Emir Yoma, en causas por narcotráfico y tráfico de armas, particularmente en la investigación por el desvío ilegal de armas argentinas a Ecuador y Croacia. El abogado fue detenido preventivamente a raíz de una denuncia de Lourdes Di Natale quien, además de ser su exesposa, era secretaria de Yoma.
Di Natale, que falleció en 2003 en un confuso episodio en el que cayó de su departamento en un décimo piso, contó que Yoma había pagado 400 mil dólares a través del vendedor de armas Diego Palleros a la empresa Daforel.
En el caso de Amira Yoma, el mediático penalista fue su representante legal en su imputación en el "Yomagate" o "Narcogate", un juicio por narcotráfico que se desató a partir de un cuaderno hallado en la detención del contador Ramón Humberto Puentes en Uruguay, donde entre otros nombres aparecía la cuñada del presidente como responsable de trasladar un "cargamento" desde Nueva York.
También, a fines de los 1990, Cúneo Libarona estuvo un mes preso luego de ser acusado de coacción agravada y de encubrimiento en la causa que investigaba el robo de un video del despacho del juez Juan José Galeano. En el marco de la causa en la que se investigó el atentado a la AMIA, el abogado representaba a dos policías acusados por el hurto, quienes finalmente fueron absueltos y todo se declaró nulo. El juez y secretario del juez a cargo de la investigación fueron presos.
Es uno de los abogados de confianza del empresario Eduardo Eurnekián y excompañero de labores de Milei, sin embargo son muchas las dudas que hay en el medio jurídico respecto al abogado. Tuvo participación en el juicio por la tragedia de la Time Warp, una fiesta de música electrónica donde cinco jóvenes de entre 20 y 30 años fallecieron y decenas debieron ser hospitalizadas —seis de ellos en terapia intensiva— a causa del consumo de drogas sintéticas adulteradas. Cúneo Libarona, junto a Fernando Burlando y Matías Morla, fueron los encargados de defender a los responsables del evento: Adrián Conci, Facundo González y Víctor Stinfale.
Su bufete defendió a Giselle Rímolo, ahora llamada Mónica Cristina María Rímolo y expareja de un famoso conductor, Silvio Soldán. La acusada se presentaba como nutricionista, homeópata, psicóloga y especialista en terapias alternativas y en 2012 fue condenada a nueve años de prisión por homicidio culposo, ejercicio ilegal de la medicina, estafa en más de 70 ocasiones y tráfico de medicamentos peligrosos.
Además, Cúneo Libarona fue defensor del empresario Sergio Taselli, apuntado en los "cuadernos de las coimas" de Oscar Centeno, chofer del funcionario Roberto Baratta. Taselli fue detenido por el juez Claudio Bonadío cuando se presentó a declarar, pero más tarde fue excarcelado.
"La casta" goza de buena salud
En los hechos, el discurso antisistema de Milei es vacuo; sus nexos dentro y fuera del gobierno que está por conformar están alineados con actores y estructuras que han corporativizado la política argentina. Su noción de "mano dura" y el histrionismo verbal aparentemente es una cortina de humo para nublar la impunidad de la que ha vivido su entorno.
Sus tesis libertarias para sacar a Argentina de la grave crisis económica auguran otro estadio de la misma, lo mismo que su promesa de salir de toda la clase dirigente que gobierna el país es solo una reconfiguración de fuerzas para poner a una sociedad cansada al servicio de los mismos políticos locales y poderes transnacionales.
Milei significa una oportunidad para el detrito tecnocrático que requiere apoderarse de los fondos públicos con el fin de sostener un modelo en pleno colapso.