Presidente de la República de Argentina, Alberto Fernández; presidentes, presidentas, primeros ministros, jefes de Delegación de los 33 países de América Latina y el Caribe congregados en esta VII Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños.
Va desde la Venezuela bolivariana, desde esta cuna de libertadores y libertadoras, un saludo especial para todas las delegaciones de la Cumbre número siete de la CELAC.
Hubiera querido estar físicamente, directamente desde el sitio de los acontecimientos, como siempre hemos estado, como siempre vamos a estar; razones que se escapan a nuestra propia voluntad, de las conspiraciones permanentes, de la persecución permanente, de la amenaza permanente, de las emboscadas que se calculan, nos hicieron tomar la decisión creo más correcta y justa de no caer en las provocaciones que pretendían manchar este momento tan esperado, tan especial para América Latina y el Caribe, esta VII Cumbre. Pero la voz de Venezuela está presente siempre, somos un Estado fundador de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños.
Hoy la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños tiene un poco más de una década; recuerdo como canciller del comandante Hugo Chávez haber participado en todos los procesos que dieron inicio a este momento de organización regional que es la CELAC.
Por allá fue en diciembre 2008, en Bahía, bajo la presidencia del compañero Lula da Silva que se dio el primer paso para unir toda América Latina y el Caribe por primera vez en 200 años, luego fue en Cancún, febrero 2010, y luego en Caracas, 2 y 3 de diciembre 2011 en que fundamos, dimos el paso para asumir el concepto y ser una Comunidad de Estados de América Latina y del Caribe. Luego vinieron las cumbres de Santiago de Chile, de La Habana, de Costa Rica, de Ecuador, República Dominicana, bueno vino toda la trayectoria, y la Cumbre de México convocada por el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Temas vitales de la integración, de la unión, asumirnos con el concepto de Patria Grande, como dijera el Libertador Simón Bolívar: "Para nosotros la Patria es América"; como dijera José Martí, el Apóstol: "Nuestra América". Asumirnos como Patria Grande y asumir la política desde la gran política, desde la Política escrita con P mayúscula, la Política de la unión en la diversidad, respetando las características específicas de los modelos políticos, económicos y sociales de cada país; respetando el programa político de cada liderazgo que esté al frente de cada país, de cada gobierno, haciendo un gran ejercicio de tolerancia, de inclusión, que nos lleve a una unión verdadera en la diversidad política, ideológica, cultural.
Grandes tareas tiene nuestra América para la integración económica, comercial, financiera. Compartimos la propuesta que ha hecho el presidente Lula da Silva, de iniciar la construcción de un Sistema Monetario Latinoamericano y Caribeño, de un sistema que nos lleve a una moneda y a un compartir de los sistemas financieros y monetarios de la región latinoamericana y caribeña. Hay que dar el primer paso fundacional, hay que dar el primer paso para andar hacia un camino que tiene que ser irreversible para la región, el camino de la integración completa, económica, comercial, financiera y monetaria.
Tenemos muchas tareas hacia adelante en el campo de la educación, de la salud, en el campo de la cultura, hay muchas tareas en el campo de la política, para defender a América Latina y el Caribe como un territorio independiente, soberano, donde prevalece la autodeterminación de los pueblos, y unir fuerzas y esfuerzos para rechazar todo tipo de intervencionismo de fuerzas o potencias fuera de nuestra región.
El mayor de los intervencionismos: Intentar desestabilizar nuestras sociedades. El mayor de los intervencionismos: Intentar volver a la época de los golpes de Estado, del asalto al poder. El mayor de los intervencionismos: Amenazar a los países con intervenciones militares. El mayor de los intervencionismos, como han hecho con Venezuela, como han hecho con Cuba durante 60 años, y con Nicaragua: Imponer medidas coercitivas unilaterales, ilegales, inmorales, imponer sanciones criminales como se les ha impuesto al pueblo de Venezuela, para tratar de llevarnos a un colapso, a una implosión de la sociedad; un golpe severo, duro, más de 924 sanciones criminales que pesan sobre la economía y la sociedad venezolana. Que nos hicieron perder, señores jefes de Estado, jefes de Gobierno, jefes de Delegación, el 99% de los ingresos petroleros que Venezuela percibía hasta hace unos años. Pasamos de 56 mil millones de dólares en ingresos directos por petróleo en un año, a 700 millones de dólares. El año pasado 2022 logramos rozar los 5 mil millones de dólares, quiere decir menos del 10% del ingreso petrolero, siendo Venezuela una nación fundamentalmente petrolera. Pero así y todo, hemos venido encontrando nuestro camino, nuestro camino de crecimiento, de desarrollo, de inclusión, y se están dando resultados milagrosos de recuperación integral, de renacimiento de Venezuela. Pero tenemos nosotros que plantar una sola voz, y que América Latina y el Caribe le diga a los Estados Unidos de Norteamérica: No más intervencionismo, no más golpismo, basta ya de sanciones contra los países libres y soberanos del continente, unamos una sola voz por la soberanía y por la independencia.
Señor presidente Alberto Fernández, quiero ratificarle lo que ya hemos conversado, quiero ratificarle mi propuesta para el debate sobre la necesidad de que la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños tenga una estructura organizativa, tenga una arquitectura organizativa propia, como la tiene la Unión Europea que la construyó por años, como la tiene la Unión Africana por ejemplo, una estructura propia. Nuestra organización debe discutir y decidir en su momento la conformación de una poderosa Secretaría General de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños, organismo que articule todas las iniciativas de nuestros países en el día a día, de los 365 días del año, y que verdaderamente ocupe con dignidad, una Secretaría General que ocupe con dignidad la necesidad de articularnos cada vez más.
Igualmente, señor Presidente, desde Venezuela creemos que hay que tomar nuevamente el funcionamiento de los Consejos de Ministros por área; el Consejo de Ministros de Defensa para una estrategia común de defensa, una estrategia geopolítica; el Consejo de Ministros de la Salud, los Consejos de Ministros de la Educación, de la Cultura, de la Economía.
Retomar la dinámica que ya en la primera etapa de la CELAC tuvimos, que logró acercar posiciones, políticas públicas comunes, aprendizaje común, y le dio una gran fortaleza a la CELAC y una presencia real en la vida de nuestros gobiernos, de nuestros estados y nuestros países.
En fin, creemos que ha llegado el momento de que la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños comience a construirse desde adentro con una visión muy clara de lo que debe ser el devenir de nuestros países y la necesidad de ir echando sólidas bases en la construcción de la unión de nuestros países, la unión, legado de los libertadores y las libertadoras de nuestra América, la unión para la liberación, la unión para el desarrollo, la unión para la construcción de un nuevo modelo de sociedad en esta América Latina rebelde, caribeña, mestiza y hermosa, nuestra América; la unión para la liberación. Ese es el llamado desde la Venezuela bolivariana que hacemos a nuestros hermanos y hermanas de América Latina y el Caribe.
La Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños ha llegado a su VII Cumbre y estamos seguros que de aquí en adelante se marcará un nuevo ritmo de mayor profundidad y de mayor calado en la articulación de pueblos, Estados y gobiernos. Tengan toda la seguridad de que Venezuela, la Venezuela bolivariana, nuestra República amada, estará siempre a la vanguardia de estos procesos.
Muchas gracias señor Presidente, muchas gracias jefes y jefas de Delegación ¡Hasta la victoria siempre!
Caracas, 24 de enero de 2024