Las fuerzas de ocupación estadounidenses en Siria han estado entrenando al menos a 60 militantes afiliados a ISIS y Al-Qaeda en la base de Al-Tanf para llevar a cabo ataques dentro del territorio de los antiguos Estados soviéticos, según el Servicio de Inteligencia Exterior de Rusia (SVR).
"Según datos fidedignos recibidos por el Servicio de Inteligencia Exterior de Rusia, el ejército de Estados Unidos está reclutando activamente militantes de grupos yihadistas afiliados a [ISIS] y Al-Qaeda para llevar a cabo ataques terroristas en Rusia y los países de la CEI", reseña The Cradle.
Los militantes estarían realizando un "curso de capacitación acelerado" para aprender a fabricar y utilizar artefactos explosivos improvisados y métodos subversivos. El objetivo serían misiones diplomáticas extranjeras pero también habría un despliegue pequeño para ingresar en espacios de la Comunidad de Estados Independientes (CEI).
Sin embargo, esta base no es nueva en el entrenamiento de yihadistas del Estado Islámico. En 2017 reportaron que en la base Al-Tanf se refugiaban unos 350 militantes terroristas. En esa oportunidad el Pentágono no pudo ofrecer explicación coherente sobre lo sucedido, tampoco justificar la permanencia de la base aun cuando ya el Estado Islámico había sido derrotado.
Lo cierto es que en esa base desde hace tiempo se ha venido reportando el movimiento de yihadistas, así como el entrenamiento de estos por parte de los marines estadounidenses, por lo que hay que asumir la utilidad de la misma como un núcleo de formación terrorista para la exportación a otros escenarios de conflicto a favor del eje atlantista.