El teniente general Igor Kirillov, jefe de las Tropas de Defensa Radiológica, Química y Biológica (RCBZ) de las Fuerzas Armadas de Rusia, dijo en una sesión informativa que las compañías médicas Black & Veatch y Metabiota, financiadas por el hijo del presidente estadounidense Hunter Biden, se dedicaron a la creación de infecciones de cuarentena que podrían dañar la agricultura de algunos países.
El militar señaló que la información relevante está contenida en los informes que estas empresas han preparado para el Pentágono. Estos documentos mencionan "Proyectos veterinarios" con el código "TAR", implementados en el territorio de Ucrania.
Según él, el enfoque principal de estos proyectos son las "infecciones de cuarentena económicamente significativas que pueden dañar la agricultura" de regiones enteras.
Kirillov detalló que infecciones como el muermo (afecta a caballos, mulas, camellos y burros), peste porcina clásica y africana, influenza aviar altamente patógena y enfermedad de Newcastle (plaga de aves asiáticas) pudieron haberse creado en estos laboratorios.
También señaló que en varias regiones de Ucrania, incluidas las áreas fronterizas con Bielorrusia y Rusia, se estudió la población de portadores de peste porcina africana, jabalíes. Kirillov llamó la atención sobre el empeoramiento de la situación de esta enfermedad en Europa del Este: se registraron brotes en Letonia, Estonia, Lituania y Polonia.
Durante la operación militar en Ucrania las fuerzas rusas hallaron laboratorio que posiblemente eran usados para crear armas biológicas. En un principio las autoridades estadounidenses banalizaron el reporte, pero luego reconocieron su existencia.