El colapso del banco estadounidense Silicon Valley Bank (SVB) y la reacción en cadena que pudiera generar ponen en relieve la grave situación que atraviesa el gigante europeo Credit Suisse, que lleva varios meses inmerso en una especie de crisis que no parece tener solución a corto plazo y que podría acentuarse con la reciente pérdida de confianza.

El informe anual del banco suizo, cuya influencia es enorme, deja entrever que el momento es delicado en tanto que sufre una constante fuga de clientes, un desangre a cuentagotas para el que no han conseguido un torniquete.

De acuerdo con El economista Credit Suisse cerró su jornada bursátil en la bolsa de Zúrich con grandes pérdidas de 9,58%, arrastrado —como el resto del sector bancario— por el desplome del banco estadounidense tras haber alcanzado varias veces su mínimo histórico a lo largo del día. Las acciones este martes 14 de marzo cayeron 5% hasta los 2,14 francos suizos.

Otros datos:

• En los últimos seis meses, las acciones de Credit Suisse han perdido más de 55%. 
• Comenzaron a sufrir retiros de depósitos en el cuarto trimestre de 2022. 
• Han tenido que usar parcialmente los colchones de liquidez de la entidad.
• La entidad ha sido incapaz de revertir esta situación.
• Las salidas de clientes están alcanzando niveles sin precedentes y no parece que esta tendencia vaya a revertirse pronto. 
• En noviembre, el banco anunció salidas de alrededor de 84 mil millones de francos suizos —casi 86 mil millones de euros— en el negocio central de gestión de patrimonio después de que la tormenta en las redes sociales sobre la salud financiera del banco asustase a muchos clientes.  
• Los inversores confían cada vez menos en la supervivencia de Credit Suisse.