Rusia, Irán y Turquía están dispuestos a seguir trabajando juntos para combatir el terrorismo en Siria, dijeron los tres países en una declaración conjunta adoptada en la 18ª reunión internacional del Formato de Astaná, una iniciativa diplomática fuera de los organismos multilaterales tradicionales.

Las partes expresaron su firmeza en el combate al terrorismo, así a las agendas separatistas destinadas a socavar la soberanía y la integridad territorial de Siria, que amenaza la seguridad nacional y regional.

Los garantes exhortaron a la comunidad internacional, a las Naciones Unidas y a sus organismos humanitarios, para que aumenten su asistencia a toda Siria mediante proyectos de recuperación temprana y de resiliencia, incluida la restauración de los activos de infraestructura básica, reseña la agencia TASS.

Asimismo, rechazaron "todas las sanciones unilaterales y "subrayaron la necesidad de eliminar los impedimentos y aumentar la asistencia humanitaria en todo el país sin discriminación, politización ni condiciones previas".

En cuanto a la seguridad de Siria, Rusia, Irán y Turquía acordaron que solo es posible si se logra la preservación de la soberanía y la integridad territorial del país, al tiempo que condenaron el robo de petróleo a la nación árabe. También rechazaron los continuos ataques militares israelíes en Siria, que violan el derecho internacional y ponen el peligro la estabilidad de la región.