El uso de energías más amigables con el planeta está rodeado de terminologías poco honestas y realistas, incluso se espera que los combustibles fósiles tengan un crecimiento absoluto hasta 2050, según explica Chris Wright, consejero delegado de Liberty Energy.

La llamada "transición energética" es proyectada como una alternativa rápida, fácil y escalable para eliminar el uso de combustibles fósiles sin graves repercusiones para las personas. Sin embargo, en la realidad no ocurre con tanta facilidad.

De acuerdo con la distribución actual de la energía primaria por fuentes, y las previsiones de organizaciones como la Administración de Información Energética (AIE) de Estados Unidos en su International Energy Outlook 2021, la "transición energética" es inexistente.

No hay manera, al menos por ahora, de que la energía primaria generada por petróleo o gas sea sustituida por renovables. El consumo mundial de energía primaria va a crecer casi 50% entre 2020 y 2050 a medida que muchas personas salgan de la pobreza.

Por otra parte, el consumo de petróleo aumenta en todos los escenarios de la AIE y se proyecta que aumente alrededor de 1 millón de bpd/año durante los próximos 30 años, casi el mismo aumento anual constante de las últimas cinco décadas.

¿Por qué se incrementará? Por el simple hecho de que los combustibles fósiles son abundantes, baratos y eficientes para suministrar energía fiable y densa a gran escala. Es verdad que en los últimos años las energías renovables son cada vez más usadas, pero a menudo las estimaciones son exageradas.