Según el jefe de las Tropas de Protección Radiológica, Química y Biológica de Rusia, Igor Kirillov, "las tropas rusas han obtenido más de 20 mil documentos, materiales analíticos y de referencia, y han entrevistado a testigos presenciales y participantes en programas militares y biológicos estadounidenses" desde el inicio de la Operación Especial Militar en Ucrania y el Dombás.
Además, Kirillov confirmó que los documentos, que permanecen bajo revisión y en proceso de desciframiento, sin duda reforzaron el análisis existente que argumentaba que el Pentágono tenía la intención de probar armas biológicas en las poblaciones del país de Europa del Este y sus vecinos, Rusia incluida.
El funcionario ruso hizo referencia a los registros adquiridos y examinados por las Tropas a su mando como prueba de que los científicos de EcoHealth Alliance han estado investigando los patrones de transmisión de la cepa del coronavirus desde al menos 2015. La investigación del coronavirus en el Instituto de Virología de Wuhan fue apoyada por Estados Unidos y un grupo no gubernamental respaldado por EcoHealth Alliance, que ha sido acusado de desempeñar un papel en la pandemia de coronavirus.
Kirillov explicó: "Anteriormente, les informamos sobre el trabajo que se está llevando a cabo en la Universidad de Boston para mejorar las propiedades patógenas de covid-19, financiado con dinero del gobierno estadounidense, y sobre la posible participación de USAID en la aparición de un nuevo coronavirus", y agregó que "el papel clave en la implementación de estos proyectos corresponde al intermediario EcoHealth Alliance".
También, señaló el jefe ruso que los "documentos recibidos de la Agencia de Reducción de Amenazas de Defensa confirman que, desde 2015, especialistas de esta entidad han estado estudiando la diversidad de la población de murciélagos, buscando nuevas cepas del coronavirus y mecanismos de su transmisión de animales a humanos", agregando que "se estudiaron más de 2 mil 500 ejemplares".