Este miércoles 4 de agosto, el gigante energético ruso Gazprom afirmó que las "sanciones" de Occidente hacen que sea imposible devolver adecuadamente una turbina para el gasoducto Nord Stream de Rusia a Alemania, lo que afecta el suministro de gas a los países europeos.
El director ejecutivo de Siemens Energy, Christian Bruch, dijo anteriormente que la empresa alemana había cumplido todas las condiciones para enviar la turbina reparada a Rusia y culpó al país euroasiático por la falta de documentos.
Por su parte, la empresa rusa argumentó que el bloque de Canadá, la Unión Europea (UE), el Reino Unido y la inconsistencia de la situación actual con las obligaciones contractuales actuales por parte de Siemens hacen que la entrega del motor 073 a la [estación compresora] de Portovaya "sea imposible".
A mediados de junio, Gazprom redujo el suministro de gas a través de Nord Stream a 40%, ya que Siemens, con sede en Alemania, no había devuelto la turbina a tiempo después de las reparaciones en Canadá, debido a las "sanciones".
Vitaly Markelov, subdirector de Gazprom, dijo que Siemens no estaba cumpliendo con sus obligaciones de reparar los motores defectuosos de Nord Stream. Asimismo, afirmó que la entrega de la turbina de Canadá a Alemania, en lugar de Rusia, no cumplió con el contrato.
En julio el suministro de gas ruso descendió a su nivel más bajo, 20%, pero Occidente sigue culpando a Rusia, aun cuando su crisis energética es causada por sus acciones.