Informes del gobierno de Reino Unidos revelan que millones de hogares del Reino Unido podrían enfrentarse a un invierno traicionero plagado de apagones si se interrumpe el suministro de gas natural ruso a Europa.

"Como gobierno responsable, es correcto que planifiquemos todos los escenarios extremos, por improbables que sean", señalan funcionarios de Whitehall —reseña Zero Hedge— quienes han escenificado los peores casos señalando que es posible que se produzca una escasez generalizada de gas natural si Rusia sigue restringiendo los suministros a Europa.

Dijeron que Gran Bretaña, que a diferencia de otros países de la UE , está bien preparada para cualquier interrupción del suministro. “Las plataformas noruegas están conectadas directamente al Reino Unido y tenemos la segunda mayor infraestructura de importación de GNL de Europa, mientras que Alemania no tiene ninguna", detalla.

El modelo supone que las importaciones de gas natural del Reino Unido procedentes de Noruega podrían reducirse a la mitad. Además, supone que no se importará gas natural de los interconectores de los Países Bajos y Bélgica, debido a las medidas proteccionistas. Esto obligaría a las autoridades a cerrar las centrales de gas natural del Reino Unido y las instalaciones industriales de alto consumo energético para mantener el flujo de gas natural a los hogares.

La reducción de la capacidad de generación de energía de gas natural en la red provocaría apagones para seis millones de hogares. La fuente de Whitehall añadió: "Dada la histórica dependencia de la UE del gas de Putin, el invierno podría ser muy duro para los países del continente".

Esto demuestra nuevamente que las "sanciones" contra Rusia son un tiro al corazón de Europa. Recordemos que el Reino Unido fue uno de los primeros en plegarse a la política imperial estadounidense. Actualmente registra la mayor inflación en décadas y el aumento de los servicios podría disminuir el PIB.