Mar. 19 Marzo 2024 Actualizado ayer a las 4:26 pm

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El canciller ruso Serguéi Lavrov (Foto: Grigory Sysoyev / Sputnik)

Los principales titulares de la entrevista del canciller ruso Lavrov con Sputnik

Serguéi Lavrov, el jefe de la diplomacia de la Federación Rusa, habló extensamente en una entrevista exclusiva con Dmitri Kiselev, director general de Rossiya Segodnya International Media Group, el grupo mediático al que pertenece la agencia Sputnik, sobre diferentes temas. Aquí reseñaremos brevemente sobre lo dicho en torno a las batallas geopolíticas en boga, Ucrania y el excepcionalismo estadounidense.

Ucrania como epicentro de la batalla geopolítica

Las naciones occidentales quieren paralizar a Rusia con sanciones para provocar una "década de regresión", declaró Lavrov, refiriéndose a las palabras de la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.

"Estamos en el centro de una batalla geopolítica. No hay duda de ello", dijo el ministro de Relaciones Exteriores.

Los soldados rusos que luchan en Ucrania son "héroes" cuyas "hazañas son para el futuro de la humanidad, en el que no habrá condiciones para la hegemonía total de Estados Unidos", agregó Lavrov.

La creencia de Estados Unidos en su excepcionalidad

Estados Unidos "ha subyugado" a los políticos europeos, removiendo los "últimos rastros de independencia" de la Unión Europea, argumentó el diplomático. El tipo de "democracia" que defienden se reduce a "un derecho para que impongan a los demás cómo debería ser la democracia", dijo Lavrov.

El ministro de Relaciones Exteriores ruso argumentó que Washington presiona a otras naciones para que cumplan con sus órdenes, sin ofrecer beneficios por el cumplimiento y amenazando con castigar a los disidentes. Llamó al enfoque "el pináculo del pragmatismo, pero también del cinismo".

El núcleo de la política exterior de Estados Unidos es el excepcionalismo estadounidense y la creencia de Washington en su "infalibilidad y superioridad", según Lavrov.

Intenciones occidentales en Ucrania

El conflicto en Ucrania continúa furioso porque las naciones occidentales, lideradas por Estados Unidos, se niegan a detenerse "hasta que concluyan que han eliminado las amenazas a su hegemonía", insistió Lavrov. Según el principal diplomático ruso, Occidente le ha prohibido a Kiev buscar la paz con Moscú.

"Nadie se opuso cuando [el presidente ucraniano Vladímir] Zelenski prohibió las negociaciones con Rusia por ley. Nadie lo regañó cuando él... afirmó que no entiende quién toma las decisiones en Rusia y con quién debería hablar".

Es probable que Zelenski se sienta avergonzado de ser controlado y manipulado por Occidente y recurra a la proyección psicológica, sugirió Lavrov.

El próximo 'antirruso'

Se le preguntó a Lavrov cuál país podría convertirse en "antirruso", un término que los líderes rusos han utilizado para describir a Ucrania en su estado actual. Respondió que Moldavia podría ser elegida para ese papel debido a la personalidad de su presidenta, Maia Sandu.

Sandu fue "instalada al timón del país a través de métodos específicos que estaban lejos de la libertad y la democracia", evaluó Lavrov. "Tiene la ciudadanía rumana, está lista para fusionarse [Moldavia] con Rumania y para hacer casi cualquier cosa". Además, Sandu está "corriendo hacia la OTAN", argumentó el diplomático.

Georgia encajaba en la descripción del expresidente Mikhail Saakashvili, dijo Lavrov, pero agregó que el actual gobierno en Tbilisi ha puesto el interés nacional en primer lugar.

No se necesita ayuda en Ucrania

Rusia no tenía ni tiene ninguna intención de pedir asistencia militar a sus aliados en la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva (OTSC) en Ucrania, declaró Lavrov, refiriéndose al grupo de defensa regional del que Rusia es miembro.

"Tenemos todo lo que necesitamos para lograr los objetivos de la operación militar especial, para poner fin a esta guerra, que Occidente comenzó a través del régimen de Kiev después del golpe [de 2014] [en Ucrania]", enfatizó.

La versión china del globalismo diseñado por Estados Unidos

Lavrov describió las relaciones ruso-chinas actuales como las más sólidas de la historia, y agregó que no tienen "restricciones, límites ni temas prohibidos para la discusión".

Tanto Moscú como Beijing simplemente quieren perseguir el desarrollo nacional "en el marco de las normas existentes del comercio internacional".

"China vence a Estados Unidos en su propio territorio bajo sus propias reglas", evaluó el diplomático. Según Lavrov, es por eso que Estados Unidos está renegando de los principios económicos que extendió por todo el mundo y de los que se benefició en el pasado.

A los ojos de Moscú, la forma actual de globalización "ya no tiene rasgos positivos", dijo Lavrov, y agregó que "nos dimos cuenta antes porque fuimos los primeros en recibir un golpe".

Rusia tuvo "menos inmersión" que China en el sistema financiero global y otros mecanismos influenciados por Estados Unidos, de los que ahora abusa Washington, explicó.

A China le llevará algún tiempo reducir su participación en esos mecanismos y crear herramientas alternativas para defender sus intereses, pero se está moviendo en esa dirección, predijo Lavrov.

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