Mié. 17 Abril 2024 Actualizado 8:19 pm

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Miles de contenedores se apilan todos los días en los puertos vecinos de Los Ángeles y Long Beach, las principales puertas de entrada a Asia para el comercio que nutre a Estados Unidos (Foto: Mario Tama / Getty Images)

La crisis global de suministros golpea a Estados Unidos

Miles de contenedores se apilan todos los días en los puertos vecinos de Los Ángeles y Long Beach, las principales puertas de entrada a Asia para el comercio que nutre a Estados Unidos de productos importados y además permite la salida de bienes manufacturados en el país.

Economía pandémica: Los estadounidenses están atravesando una nueva fase de la economía en la que se resiente la escasez de una sorprendente variedad de cosas: kits de prueba para detectar covid-19, piezas de automóviles, semiconductores, barcos, contenedores de envío e incluso la mano de obra calificada: trabajadores. La pandemia de coronavirus ha enredado las cadenas de suministro mundiales de varias formas y el auge de la variante Delta ha provocado varios cierres en las fábricas de Asia justo cuando la demanda de productos de todo tipo ha comenzado a repuntar.

Embotellamiento portuario: La expresión más gráfica de estas paradas a lo largo de la cadena de suministro se refleja en el apilamiento de contenedores de carga en la costa de Los Ángeles y Long Beach, se trata de contenedores que transportan más del 90 por ciento de los bienes comercializados en el mundo, mayoritariamente fabricados en China. El Banco Mundial estima que 8,5% de los contenedores del mundo está detenido en esos puertos, o en sus cercanías.El aumento en la demanda de importación ha encarecido el costo por contenedores y los cierres forzados de fábricas debido a las restricciones por el covid-19 han desatado una ola de sobreprecio:

  • Antes de la pandemia, reservar un contenedor que contiene aproximadamente 35 mil libros costaba $ 2 mil. Ahora cuesta $ 25 mil.
  • Enviar un paquete de Shanghái a Los Ángeles es actualmente seis veces más caro que enviar uno de Los Ángeles a Shanghái.
  • En todo EE.UU. los precios al consumidor subieron más de 5% en 12 meses.

Otras aéreas afectadas: La Asociación de Camiones de Minesota estima que el país tiene una escasez de alrededor de 60 mil conductores, debido a problemas de reclutamiento, jubilaciones anticipadas y clases de escuela de manejo canceladas por covid.

  • La mayor terminal de contenedores de Norteamérica, comenzó a trabajar las 24 horas luego de que la Casa Blanca intervino para subsanar cuellos de botella que complican el comercio y aumentan los precios.
  • A partir de este mes, el Servicio Postal de EE.UU. está reduciendo el uso del transporte aéreo para ahorrar dinero.

"Soluciones": El plan Build Back Better impulsado por el gobierno de Joe Biden incluye miles de millones de dólares para invertir en investigación básica y reforzar las cadenas de suministro nacionales, pero la globalización, que genera atascos en cadenas de suministro que se extienden desde la extracción de recursos en lugares como Australia hasta la producción en fábricas asiáticas y compradores en Occidente, difícilmente puede subsanarse con un plan pensado para la población consumista estadounidense.

Por qué es importante: Escenarios donde las largas filas fuera de supermercados para obtener bienes de primera necesidad parecían ser exclusivos de países del Sur Global, hoy abundan relatos en medios estadounidense sobre las dificultades que atraviesa la clase media para obtener desde papel higiénico hasta autopartes. El Fondo Monetario Internacional (FMI) advirtió esta semana que las alteraciones en las cadenas de abatecimiento están encareciendo los productos dentro de una economía marcada por la dependencia de los bienes que activan la cadena de suministro global.

A diferencia de países como China, que logró reactivar la economía y diversificar negociaciones con otros países productores e importadores en plena etapa "transpandemia", EE.UU. no logra estabilizar su tejido económico luego de enfrentar la crisis del covid-19 como un problema exclusivamente sanitario y no como situación con múltiples implicaciones sociales y económicas que, por el mal manejo, terminarán incrementando la brecha de desigualdad incluso en los países periféricos.


Reporte del Instituto Samuel Robinson del 15/10/2021.

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