A mediados de enero, el primer ministro jamaiquino Andrew Holness instruyó al gobierno de su país "avanzar con rapidez" en la abolición de la monarquía constitucional de la nación, el paso final para eliminar la conexión formal de la isla caribeña con Gran Bretaña, junto con el colonialismo y el pasado racializado que la acompaña.
Holness declaró que "es hora de que Jamaica se convierta en una república. (...) Para nosotros, el proceso no es sencillo, y lo sabemos desde que comenzamos este viaje. Y nos aseguramos de marcar cada casilla a medida que avanzamos deliberadamente en ese sentido", recoge un reporte de Forbes.
Si bien Jamaica se independizó del Reino Unido en 1962, la monarquía británica permaneció como Jefe de Estado.
Anteriormente, en junio de 2022, el gobierno jamaiquino reveló su intención de convertirse en una República para 2025.
La oportunidad republicana parece ideal con el fallecimiento de la reina Isabel II en septiembre de 2022, pues el Palacio de Buckingham intenta encontrar un equilibrio bajo un nuevo monarca, Carlos III, mientras lucha contra múltiples acusaciones de racismo.
- En noviembre de 2021, Barbados suprimió a la monarquía británica como su Jefe de Estado. Así, Jamaica probablemente se convertirá en la segunda nación caribeña en reclamar su completa independencia del poder colonial de Reino Unido cuando finalice su nueva estructura como República.
- Por otro lado, Belice también señaló su interés en abolir la monarquía y convertirse en una República.
En el frente diplomático, el impulso de Jamaica para poner fin a su relación con el Palacio de Buckingham tiene sus raíces en parte en una decisión de inmigración de 2003. Bajo el mandato del primer ministro británico Tony Blair, los ciudadanos jamaiquinos vieron suspendidos permanentemente su acceso sin visa al Reino Unido, creando una barrera de viaje entre la población caribeña, su Jefe de Estado y la diáspora británica.
De esta manera, y hasta la actualidad, los ciudadanos de Jamaica son los únicos ciudadanos dentro de la Commonwealth que requieren una visa para visitar la tierra donde radica su Jefe de Estado.
En 2015, un error de política exterior del Primer Ministro británico, David Cameron, tensó aún más la relación de Jamaica con su actual Jefe de Estado. Conocido como el Escándalo Windrush, el gobierno británico deportó erróneamente a cientos de jamaiquinos británicos. En lugar de pagar reparaciones por la esclavitud, Cameron se ofreció a patrocinar la construcción de una nueva prisión jamaiquina.
Estos errores de política exterior y la reciente revelación del racismo real planteado por el príncipe Harry y Meghan Markle han hecho que la conversión de Jamaica a República sea oportuna debido a la historia colonial de racismo, discriminación y desigualdad.