Hillary Clinton y la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, insinuaron que el presidente de Rusia, Vladimir Putin, ordenó los disturbios del Capitolio. Sus especulaciones, sin pruebas, llegaron al punto de querer iniciar una comisión "al estilo del 11 de septiembre" para investigar qué condujo a los eventos del 6 de enero.
La ex secretaria de Estado de Estados Unidos entrevistó a Pelosi en el podcast "Tu y yo ambos" sobre la revuelta en los Estados Unidos. En la conversación, Hillary afirmó que el presidente saliente Donald Trump tenía "otras agendas" mientras estuvo en la Casa Blanca y agregó que espera saber algún día con quién él "estaba en deuda" y "quién mueve los hilos".
Clinton dijo que le "encantaría conocer los registros telefónicos" de Trump para "ver si estaba hablando con Putin el día que los insurgentes invadieron nuestro Capitolio". Después le preguntó a Pelosi si sería necesario establecer una comisión como la del 11 de septiembre para determinar a los responsables (con el dedo apuntando al presidente de Rusia).
Pelosi la siguió en las teorizaciones. "No sé lo que Putin tiene sobre él política, financiera o personalmente, pero lo que sucedió la semana pasada fue un regalo para Putin, porque Putin quiere socavar la democracia en nuestro país y en todo el mundo", comentó la presidenta de la Cámara Baja. "Así que sí, deberíamos tener una comisión del 11 de septiembre y hay un fuerte apoyo en el Congreso para hacer eso", dijo.
Previo a las elecciones de 2016 y durante los cuatro años de mandato de Trump, la dirección del Partido Demócrata se encargó de elaborar un falso relato de relaciones ocultas entre el mandatario estadounidense y Rusia, digno de comparación con cualquier teoría conspirativa. Esa campaña no impidió que Trump llegara a la presidencia y tampoco que fuese expulsado de la Casa Blanca antes de terminar su administración mediante un juicio político.
Lo que sí ha traído es cuestionamiento por los esfuerzos y recursos derrochados en investigaciones que no han conseguido ninguna prueba incriminatoria. Byron York, comentarista conservador, respondió a la entrevista y escribió: "Hubo una investigación de la Cámara. Una investigación del Senado. Una investigación fiscal especial con plenos poderes de aplicación de la ley. Consultas obsesivas de los medios. Ninguno encontró lo que Hillary Clinton quería encontrar. Entonces ella quiere otro".
El periodista Aaron Mate etiquetó las elucubraciones de Clinton y Pelosi como "BlueAnon", una versión demócrata de la desacreditada teoría de conspiración de QAnon que sectores de extrema derecha difunden.