El economista venezolano Francisco Rodríguez ha respondido a una interrogante de un periodista de Bloomberg, quien dijo que la relatora especial de la ONU expresó que era difícil contestar por qué Irán, un país que ha sido sometido a sanciones ilegales similares a las que se emitieron contra Venezuela, produce petróleo y el país latinoamericano, no.

“La respuesta es sencilla”, dice Rodríguez para continuar con la explicación: “Irán lleva cuatro décadas con sanciones. Cuando la primeras sanciones en 1979, la producción petrolera iraní se desplomó – como ocurrió en Venezuela”. Refiere que la nación persa fue progresivamente recuperando el ritmo de producción, sin embargo, nunca alcanzó los niveles anteriores a las medidas coercitivas unilaterales.

Los datos publicados por la OPEP sobre el rendimiento de los países petroleros en el último trimestre de 2020 indican que la industria venezolana ha percibido un pequeño incremento en ese periodo. El economista venezolano cita las cifras para fundamentar el comentario de que las economías suelen ajustarse con el tiempo a las sanciones. “Esta recuperación pudiera estar ocurriendo ya en la producción petrolera venezolana”, afirma.

Por lo tanto, no es que a Irán no le hagan efecto las sanciones, cuestión que de plantearse así haría parecer que el deterioro del sector petrolero en Venezuela no es resultado directo de las medidas criminales del Gobierno de Estados Unidos.

Al contrario, la producción iraní sí se ha visto disminuida en los últimos años, producto de la agudización de las sanciones y la adopción de un régimen multilateral entre 2012 y 2016, detalla Rodríguez, “aunque se han permitido excepciones que le permitieron continuar exportando a algunos de sus socios comerciales”.

En vez de hacer una comparación que no se ajusta a los contextos individuales de las naciones bloqueadas, Rodríguez explica que la revisión del desarrollo de la economía iraní “puede servirnos para entender una ruta posible de evolución de la economía venezolana si esta sigue sancionada hasta el 2060”.

Las sanciones de Washington, que fueron el principal recurso del expresidente Donald Trump en materia de política exterior, han provocado el recorte en los ingresos de exportación de Irán y Venezuela, pero también están llevando a que ambos países fortalezcan sus lazos de cooperación económica para resistir a la afrenta.