Poco se habla de una de las más infames trampas con las que el escualidaje venezolano le hace mala fama al país puertas afuera: la de las solicitudes fraudulentas de asilo político en EEUU. Se trata también de un desfile de estafadores que cae en manos de otros estafadores.
Junio 15 de 2015, 12:54 pm